MODULO gesTIC: Los desafíos de la inclusión de las TIC en la educación media.

La educación media ha tenido en los últimos años un desafío importante por delante, el de masificarse. La escuela secundaria se pensó como educación para pocos, preservada para ciertos sectores sociales y con una formación que la conectara con la educación universitaria. A pesar de las distintas reformas efectuadas en este nivel siempre persistió la pregunta de a quien incluir y que saber. Persistía el debate sobre que contenidos debían estar incluidos que el modelo clásico no albergaba o el rol de preparación al mundo del trabajo que luego durante el siglo XX irrumpió con fuerza.

A todo esto debemos sumarles las demandas sociales crecientes que se traducían en mayor cantidad de establecimientos, crecimiento de la matricula y con esto otras dificultades como la permanencia, problemas de convivencia que terminan en el abandono educativo de muchos adolescentes, o con experiencias de baja calidad y poca intensidad. Muchos análisis frecuentemente asocian esta dificultad creciente en el "desinterés" de los jóvenes o sus difíciles condiciones de vida.

La escuela media no ha hecho un real análisis de lo que muchos estudiosos creen que es el nudo del problema: la finalidad, la concepción, el modelo y la organización de la escuela en si misma. Lo que incluye, lo qué excluye y como brinda esos conocimientos. También las situaciones sociales, sus problemáticas y las opciones de vida de los jóvenes no encuentran lugar en la escuela. La escuela también ha tenido una posición ambigua frente a la ocupación laboral.

Frente a este panorama la escuela esta además inserta en una sociedad más compleja, en una sociedad de la información en donde los procesos se aceleran a una velocidad difícil de comprender para una institución con tantos problemas que resolver.
Los roles se han modificado sustantivamente. El alumno ya no es mas el oyente/repetidor sino de personas que acceden a un cúmulo de información y comunicación y reclaman estrategias para abordarla.
A pesar de todo, cuando se logra incluir es solo como un complemento que no reviste de mayor importancia. Es parte de estos conocimientos excluidos que sabemos existen pero no podemos abordar del todo.

Es ya difundido el beneficio de incluir las TIC en el proceso de enseñanza-aprendizaje. El incremento de la motivación, el dominio de los tópicos avanzados, los alumnos actuando como expertos, etc. Propician que el docente deje de ser la única fuente de conocimiento, el aprendizaje más personalizado y autónomo, pone en juego la creatividad, la intuición, la iniciativa y la participación de los alumnos, fortalece el sentimiento de solidaridad y respeto mutuo, se centra en el desarrollo de producciones colectivas y ayuda a la transferencia de los aprendizajes.
Todos estos procesos ayudan a ubicar a la escuela en un nuevo contexto social y requiere un nuevo rol docente. Se requiere un docente que lidere procesos del tipo colaborativo y guíe a los alumnos en la reflexión con procesos creativos y orientadores.

En las instituciones escolares la gestión de las TIC deben estar enmarcado en un proyecto escolar según criterios pedagógicos. Incluyendo a todos los integrantes de la comunidad educativa. En los últimos años en Argentina se ha invertido mucho presupuesto en planes nacionales y provinciales con la intención de equipar a las escuelas de los medios para incorporar las TIC a la educación. Sin embargo la falta en muchos casos de un plan de gestión en esta materia no ha resultado en en amplio beneficio según lo esperado. La falta de capacitación de los equipos directivos y docentes, la ausencia del resto de la comunidad educativa y las falencias del sistema educativo ha sido parte de este fracaso.
En muchos casos se sigue pensando a las TIC como el equipamiento y la tecnología pero no como el proceso de enseñanza aprendizaje. Se piensa en equiparse sin embargo no hay suficiente tiempo destinado a capacitación ni tiempo suficiente para desarrollar planes de gestión institucional que contengan las TIC como eje articulador.

Es cierto que las políticas públicas en relación con las nuevas tecnologías y su contexto educativo han tenido falencias graves. No se ha coordinado acertadamente la relación entre capacitación y equipamiento, además no se planifica la inclusión de las TIC por cuanto se ven como un recurso más o una colección de herramientas divertidas para el aula y no como un verdadero proceso de cambio. Es cierto también que ahora es cuando se comienzan a ver que gestionar no es alentar a su utilización y la coordinación de los horarios de sala de informática, sino algo mas profundo. Algo que requiere sentarse a pensar su desarrollo y para esto es necesario acordar con todos los actores de la comunidad educativa. Es necesario en definitiva cambiar el modelo de las instituciones educativas, democratizando, socializando y generando espacios de participación.

Inés Dussel-Myriam Southwell “Los desafíos de la inclusión masiva”. Revista El monitor Nº19.
Lugo Maria teresa, Nelly Valeria “ La gestión de las TIC en las escuelas, el desafío de gestionar la innovación”.
Debora Kozak, “Cruzar el puente”.